Hoy os voy a hablar de un descubrimiento sobre el tema de los vinilos personalizados que ya traté la semana pasada y que tanta curiosidad os despertó. ¡Os cuento! Se trata de un plotter de corte llamado Silhoutte Cameo que se conecta al ordenador como si fuera una impresora. En lugar de tinta, tiene una chuchilla que traza las formas que hayamos diseñado sobre diferentes tipos de vinilo que luego podremos aplicar donde queramos. Y he aquí la mejor parte: permite utilizar vinilo para aplicar sobre la ropa e incluso ¡tela fina! ¿Os imagináis las posibilidades? Podríamos crear troquelados, estampar camisetas...
Siempre había pensado que este tipo de máquinas tenían que ser industriales y era del todo inviable poder llevar a cabo proyectos con vinilo en casa... ¡Pero ya veis qué inventos! Aún así, es una inversión similar al de una máquina de coser, pero en ciertas páginas como DaWanda podéis encontrar buenas ofertas.
Lo cierto es que hacer un vinilo personalizado por encargo es una buena opción para una necesidad puntual, pero si sois aficionados u os dedicáis a temas de diseño gráfico, ilustración, publicidad etc. esta puede ser una muy buena inversión. Solo echad cálculos de lo que os dejáis en copisterías durante un par de meses... ¡Yo desde luego me lo apunto en mi whislist!
¿Qué os ha parecido? ¿Alguna vez habíais oído hablar de este tipo de máquinas?
¡Nos volvemos a ver en breve con un nuevo DIY! Estad atent@as ;)